12 January 2010

Adaptación...

El otro día, mientras procedía a regar el jardín de mi hogar a pie descalzo y con un vaso de Coca-Cola en mano, me percaté de algo que no parecía correcto.

Me acerqué y vi lo que parecía una planta creciendo donde no debía. Pero algo más estaba mal, el resto del tallo que venía de la planta terminaba en el mismo punto en el suelo donde comenzaba la planta indebida. Por lo que me acerqué para investigar tal situación.


Tal y como en algún momento lo sospeché, fue un cambio de sentido de crecimiento de la planta. Mi hipótesis, la cual considero muy plausible, es que el propio peso de la rama ésta se deformó hasta chocar con el suelo. Al encontrarse con el suelo e impedirle seguir creciendo, empezó a
crecer como su genotipo lo indica... en contra de la gravedad también llamado geo o gravitropismo negativo.

Interesantemente, ese no era el único ejemplar de tales características en mi jardín. Existían otros dos más que divisé después. En la imagen siguiente se puede observar como se dobló en un ángulo de aproximadamente 90° la rama.



Sorpresivamente, el tercer y último ejemplar divisado, en cierta manera refuta mi hipótesis planteada. En particular en cuanto a que el choque impidió que la planta cambiara de dirección. Esto indica que el gravitropismo de por si, es capaz de generar tal cambio estructural en la rama.


Es impresionante como las plantas, siendo organismos relativamente simples y bastante inanimados aunque pero llenos de vida al igual que el resto de los seres del planeta, son capaces de adaptarse a su entorno físico. No confundir esta capacidad de adaptación, con la también maravillosa capacidad de adaptación humana... están en dos niveles distintos y no comparables pero igualmente bella.

La adaptación humana no se caracteriza por un cambio a nivel físico, o al menos no es lo más impresionante de nosotros. Pero los humanos logramos adaptarnos cognoscitivamente al entorno cambiante... a un entorno cultural y social que cambia y se modifica con las decisiones de todos los participantes. Nuestra capacidad para poder moldearnos y poder eventualmente llegar a ser lo que deseamos.

En fin, lo que comenzó como una simple en ingenua actividad cuasi-terapéutica, pasó a ser una indagación naturalista y terminando en una reflexión sobre nosotros... los humanos.

1 comment:

B. said...

Excelente jardín, y excelente entrada. Yo pensaba que esas plantas estaban así porque gente las había pasado a llevar. Así que gravitropismo negativo, eh? Ahora sé a qué culpar por mi estatura. :P