He asistido a un matrimonio realizado en el registro civil. Y no pude evitar tener mis observaciones y reparos al proceso.
Lo primero que me llamó la atención fue la solemnidad que se le daba a este asunto. Aunque esta solemnidad inicial no duró mucho y rápidamente bromas de parte de los novios y otros asistentes y hasta finalmente del oficial a cargo le quitó gran aprte de seriedad.
Luego, me llamó la atención el discurso del oficial el cual parecía más un consultor sobre temas matrimoniales dando recomendaciones y diciendo sobre las obligaciones, deberes y reponsabilidades del matrimonio y la familia. Yo personalmente no espero ir y hacer ese procedimiento y firma del contrato social y no que de paso me hagan una consultoría.
Finalmente cabe nombrar las notorias similitudes estructurales del discurso dado por el oficial y por un sacerdote en un matrimonio religioso. Terminando con una oración calcada del oficio religioso "En el nombre de la ley, los declaro marido y mujer".
Es obvio que estas últimas dos observaciones son completamente entendibles y justificadas y no haré tal desarrollo.
Por último una cosa que me comentó e hizo ver mi padre, el oficial en un momento dijo "... contrato indisoluble ...". El punto es que eso era hasta hace algún par de años, ahora existe la figura legal por la cual se puede disolver tal contrato social. Por ende el discurso oficial está desactualizado.
Lo primero que me llamó la atención fue la solemnidad que se le daba a este asunto. Aunque esta solemnidad inicial no duró mucho y rápidamente bromas de parte de los novios y otros asistentes y hasta finalmente del oficial a cargo le quitó gran aprte de seriedad.
Luego, me llamó la atención el discurso del oficial el cual parecía más un consultor sobre temas matrimoniales dando recomendaciones y diciendo sobre las obligaciones, deberes y reponsabilidades del matrimonio y la familia. Yo personalmente no espero ir y hacer ese procedimiento y firma del contrato social y no que de paso me hagan una consultoría.
Finalmente cabe nombrar las notorias similitudes estructurales del discurso dado por el oficial y por un sacerdote en un matrimonio religioso. Terminando con una oración calcada del oficio religioso "En el nombre de la ley, los declaro marido y mujer".
Es obvio que estas últimas dos observaciones son completamente entendibles y justificadas y no haré tal desarrollo.
Por último una cosa que me comentó e hizo ver mi padre, el oficial en un momento dijo "... contrato indisoluble ...". El punto es que eso era hasta hace algún par de años, ahora existe la figura legal por la cual se puede disolver tal contrato social. Por ende el discurso oficial está desactualizado.
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