Después de tres años y medio siendo un estudiante universitario me he llegado a percatar de un fenómeno particular mio (y de seguramente algunos más pero la minoría).
Pero partamos con la larga historia, siempre te dicen que al entrar a la universidad las cosas serán muy distintas que conoceras gente nueva, que se abrirá un mundo nuevo y distinto y que crecerás enormemente. Con eso en mente desde pequeño siempre quise terminar rápido el colegio ser grande y estar en la universidad.
Cuando entré, realmente no sentí gran cambio. Claro uno veía más gente, gente distinta a la que uno solía ver donde estudiaba. También como se tiene un mayor grado de libertad uno podía ver diferentes expresiones intelectuales, artísticas y sociales de ves en cuando. Pero por alguna razón nada de eso me pareció un cambio extremo, igualmente me sentía casi como en el colegio.
Hasta podría decir que me sentí defraudado por el ambiente universitario, ya que a la carrera que entré tenía en el primer semestre un muy bajo nivel de desafio intelectual/académico y much agente que estaba allí no era por gusto y deseo de aprender sino por que era un simple paso más en la vida. Además venía con la imágen del modelo europeo/estadounidense de universidad en los cuales los estudiantes viven practicamente en la universidad (si es que no viven en la universidad misma). En un entorno así la probabilidades que se genere colaboración entre los estudiantes es mayor ya que su compañero está en el cuarto de al lado y no a una hora de distancia en el sistema de transporte público.
Pero bueno, este asunto no es el medular acá... de lo que me di cuenta era que la gran mayoría de los estudiantes iniciaba una gradual transformación en seres más extrovertidos, iresponsables e infantiles debido principalmente a los nuevos grados de libertad y de autogestión que el entrar a la universidad (o dejar la educación media) conlleva. Pero yo era una de las excepciones. De algún modo ese nuevo entorno no significaba un cambio de mis niveles de libertad. A mi alrededor (gente cercana) veía, y sigo viendo, como ellos cambian y como sus intereses y prioridades también lo hacen mientras yo mantengo casi todo eso en un estado de casi inmutabilidad desde la enseñanza media.
Post Scriptum: El prefijo "anti" no tiene relación con ningún movimiento cultural o intelectual en particular que han estado de moda. Este proviene de la física y en particular de la física de partículas donde el prefijo "anti" corresponde a una entidad (partículas) que tienen propiedades físicas totalmente opuestas a las que no llevan tal prefijo.
Pero partamos con la larga historia, siempre te dicen que al entrar a la universidad las cosas serán muy distintas que conoceras gente nueva, que se abrirá un mundo nuevo y distinto y que crecerás enormemente. Con eso en mente desde pequeño siempre quise terminar rápido el colegio ser grande y estar en la universidad.
Cuando entré, realmente no sentí gran cambio. Claro uno veía más gente, gente distinta a la que uno solía ver donde estudiaba. También como se tiene un mayor grado de libertad uno podía ver diferentes expresiones intelectuales, artísticas y sociales de ves en cuando. Pero por alguna razón nada de eso me pareció un cambio extremo, igualmente me sentía casi como en el colegio.
Hasta podría decir que me sentí defraudado por el ambiente universitario, ya que a la carrera que entré tenía en el primer semestre un muy bajo nivel de desafio intelectual/académico y much agente que estaba allí no era por gusto y deseo de aprender sino por que era un simple paso más en la vida. Además venía con la imágen del modelo europeo/estadounidense de universidad en los cuales los estudiantes viven practicamente en la universidad (si es que no viven en la universidad misma). En un entorno así la probabilidades que se genere colaboración entre los estudiantes es mayor ya que su compañero está en el cuarto de al lado y no a una hora de distancia en el sistema de transporte público.
Pero bueno, este asunto no es el medular acá... de lo que me di cuenta era que la gran mayoría de los estudiantes iniciaba una gradual transformación en seres más extrovertidos, iresponsables e infantiles debido principalmente a los nuevos grados de libertad y de autogestión que el entrar a la universidad (o dejar la educación media) conlleva. Pero yo era una de las excepciones. De algún modo ese nuevo entorno no significaba un cambio de mis niveles de libertad. A mi alrededor (gente cercana) veía, y sigo viendo, como ellos cambian y como sus intereses y prioridades también lo hacen mientras yo mantengo casi todo eso en un estado de casi inmutabilidad desde la enseñanza media.
Post Scriptum: El prefijo "anti" no tiene relación con ningún movimiento cultural o intelectual en particular que han estado de moda. Este proviene de la física y en particular de la física de partículas donde el prefijo "anti" corresponde a una entidad (partículas) que tienen propiedades físicas totalmente opuestas a las que no llevan tal prefijo.